e.

Feroz

9/4/13 by e.

Y una noche, el monstruo reapareció. Tiró bomba de humo para colorear su reaparición y pasar a colores mis sueños.
Velozmente desapareció, cual ilusionista de circo.
Yo, me quedé manchada con témpera, y el dibujo de nuestra felicidad quedó incompleto nuevamente.
Amo al monstruo. Es mi monstruo. Lástima que se escurra tan rápido de mis aposentos.

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